Mañana tengo mi primer examen después de diez meses de sequía estudiantil. Este será el tercer año que hago exámenes, entregó mi historial académico, relleno mil papeles y me chupo el codo para conseguir estudiar lo que quiero. Un número con sus décimas, centésimas y milésimas me tiene que decir si valgo o no valgo.
Saque la nota que saque, entre o no entre, no pienso dejar que toquen mi autoestima. Si no salen las cosas como las planeo, encontraré la solución, porque en lo que quiero sacar matrícula de honor es en la asignatura de vivir, y por suerte ésta no se califica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario